Entradas

Mostrando entradas de diciembre, 2008

Malvados

Imagen
Fueron inútiles todos los esfuerzos por cumplir a cabalidad con la evacuación total. Los malvados sortearon hasta el último día todas las búsquedas, desatendieron todos los llamados y dejaron pasar todos los transportes. En la reunión del penúltimo día fue que decidieron que se embarcarían. ¿Qué los convenció? Lo que haya sido, sin embargo, no fue nada abrumador. Se lo tomaron con calma, a veces discutían lo mismo una y otra vez mientras se dirigían al sitio de embarque. La voz del líder no resonó como otras veces. Ante la duda vaciló en varias ocasiones. Al final inclinó su voto decisivo por la partida. Estando a unos tres o cuatro kilómetros del lugar vieron a los últimos ya bastante lejos. Eran inalcanzables. Y no había ya nada que pudiera comprobar o detectar desde la embarcación, que ellos cinco se quedaron. Los malvados se detuvieron y descansaron en la inmensidad de la sabana, a pocos metros de una laguna, con los inmensos cerros a lo lejos. Tomaron agua. El jefe sacó un pedazo

Así se planifica una vía agricola y pecuaria.

Imagen
Esos ciudadanos que ustedes ven allí no en tan ameno diálogo, puesto que no pueden ir o venir de su trabajo o de sus casas, están planificando la forma de hacerse ellos mismos su vía agrícola en tan importante sector ganadero, agrícola y de pesca (!una pelusa!). Los oí decir que pensaban hacer una "vaca" para mejorar esas vías y no tener que pararse y a veces no poder pasar por las crecidas de los ríos. Un jodedor allí presente dijo que si la vaca no daba resultados, se iría para un país donde hayan llegado los reales suyos para hacer allá esas vías.

Un venezolano que toma previsiones.

Imagen
Este ciudadano señaló que todos esos problemas que se anuncian no lo van a garrar de sorpresa.

Otra bella joven venezolana.

Imagen
Anayansy. Mi hija.

Continuamos con las mujeres bellas.

Imagen
Esta vez nos toca resaltar la belleza de mi amiga Nancy, novia de mi también amigo Leonardo Rodríguez. Ahí está.

Serie navideña de mujeres bellas.

Imagen
Angélica. Mi hija, ! Que bella es!.

Otra bella venezolana

Imagen
Bella y con un color espectacular de piel. Mi amiga Erika.

Mujeres bellas

Imagen
Esta hermosa mujer cubana es ahora nuestra. Es venezolana y punto.

Una venezolana preciosa.

Imagen
Todo está dicho.

Humor: De la feliz llegada al mundo de Cannavaro.

Imagen
El edificio donde vivo tiene dos alas unidas por un pasillo, es decir, en forma de “U”, pues. Será por esas alas que, precisamente, el hueco de la “U” está ocupado gratuitamente por palomas. Esas amigas son, como ustedes saben, bullangueras e inquietas. A mí no me molestan, es verdad, ni siquiera porque ellas protagonizan grandes peleas, unas diciéndoles a las otras que todas pueden vivir allí en paz y las otras porque quieren sacar a aquellas del edificio. Lo que me importa es el tan comentado efecto de sus excrementos en la salud humana, razón por la cual, en ausencia de políticas del gobierno condómino, decidí hacerme justicia por mí mismo. Primero fui a un centro comercial de productos veterinarios y compré una pasta así como alfeñique, que uno tiene que estirar como la masa de las hallacas, pasándose un día entero en eso y las vecinas en referencia – dado que tienes que hacerlo a la vista de ellas – casi se ríen de ti por lo inútil de tu medida. Y es que ellas esperan que o la der

Humor: Gracias por sus mensajes de todo el año.

Imagen
Casi todas las mañanas de casi todos los días de todo el año, revisé mis correos electrónicos con la esperanza de hallar uno por medio del cual la Universidad Central de Venezuela me notificaba que habían procedido a hacer efectivo el ascenso que me acordaron retroactivamente al 2002, nada menos que de Abogado 1º a Abogado 4º. También esperé el de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, ordenando al gobierno venezolano que me restituyera al cargo de Juez Superior Contencioso Administrativo, pues me anima imprimirlo bien chévere y ponerlo en la sala de mi apartamentico. Son muchos los mensajes que esperé, como también el de una casa editorial de libros de humor pidiéndome la concesión de mi derecho autor sobre el libro “El arte de joder”. Ninguno llegó, pero llegará. Aplico aquí, por analogía, un cartel que vi hace alrededor de cuarenta años en Nápoles en la época de las lluvias, en una venta de paraguas: “Se non piove, pioverá” Ustedes saben que cuando uno ve la ind