PENSANDO COMO EN EL AJEDREZ
El ajedrecista debe tener arrojo,
disciplina, constancia e inteligencia. Unidas todas ellas conducirán a la
experiencia. El ajedrecista experto debe determinar la forma en que hallará el fin que persigue y da
pasos en dirección al objetivo, pero esos pasos son solo previsibles, de modo que también debe atender probables variantes. Estas se dan en la
medida que el adversario actúa. Tiene, pues, ante sí un abanico de acciones
probables, las cuales debe calibrar al mismo tiempo.
Un jugador acorralado por un tenaz
adversario en un ataque masivo, no necesariamente está vencido. Un error del
atacante masivo puede tener mucho peso. El adversario acorralado puede lanzar
jugadas de distracción o confusión; en tal situación el atacante masivo debe
ser sereno y atender, léase bien, atender, las jugadas de distracción o
confusión, hasta entender lo que persiguen y neutralizarlas, si es el caso.
Un ataque masivo, no obstante su evidente posibilidad de éxito, no significa que quien lo hace no pueda tomar otras vías. Una vía alterna puede ser a veces mejor opción. O concurren ambas. Para eso se necesita confiar en la utilidad de todas las piezas.Eso lo dan las circunstancias.
Así haya sitiado al adversario con un
ataque masivo, puede sufrir bajas importantes y hacer negociaciones paralelas
de menor impacto. Ambos contrincantes pueden esperar mucho de estas
situaciones, en provecho de sus causas. Solo ellos conocen ese objetivo.
El rey es de movimientos cortos pero está
protegido por un ejército y además le corresponden sistemas adicionales de
defensa (enroques). Por tanto, vencerlo es tarea ardua. Si el rey
previsiblemente vencido no es atacado en forma certera, puede conseguir una
negociación que lo iguale al atacante. Este, si no encuentra la salida
oportuna, terminará perdiendo la ventaja que tuvo.
El ajedrez es harto difícil y la victoria está del lado de las cinco virtudes señaladas al inicio. Se juega en las dos partes del tablero. Muchas personas que practican el ajedrez piensan como ajedrecistas en otros campos de la vida.
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Abg. Almida Castillo.