LA RAZÓN DE MI DECISIÓN

LA RAZÓN DE MI DECISIÓN
No hago juicios sobre nadie que diga aunque sea una palabra en pro de la restitución de la democracia. Rebasa mi interés primario tratar de hurgar en cualquier motivo que tenga para apoyar eso. Si su motivación es negativa, después lo veremos y sucumbirá.
No me interesa defenestrar a nadie ni que lo enjuicien ni lo persigan. No tengo vocación de verdugo. Y además para eso están las leyes y los jueces honestos.
No abrigo rencores ni fines retorcidos para quienes nos han causado tantos daños.
Tampoco me anima algún fin subalterno con quienquiera que crea que tiene una oportunidad para reivindicarnos y no entienda que esa oportunidad no existe.
Solo me interesa el país que se venía construyendo y retomar ese hilo, esta vez con gente capacitada y de buena voluntad, removiendo lo que se hacía mal y cambiando lo que se deba cambiar.
Para estos fines que, seguramente son los de la mayoría, el estado actual de cosas es inapropiado para alcanzar aquel objetivo.
Las elecciones son un mecanismo de confianza y de paz. Si no tienen esas condiciones no vale la pena malgastar nuestro derecho al sufragio
NO VOTARÉ PORQUE, COMO SIEMPRE, POR ENCIMA DE TODO ME RESPETO A MÍ MISMO. ESTE PAÍS BUENO Y GENEROSO TAMBIÉN ES MÍO.

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