Nota que no gustó a "El Nacional".

Excepcionalmente me toca visitar la Inspectoría del Trabajo de Cagua. Por cosas del azar voy a parar a la Onidex y el Seniat de la misma ciudad. En todas tres, no escribiré mucho, por sus edificaciones, instalaciones, equipos, orden y atención al público, me sentí un ciudadano del primer mundo. Así se debe atender y entender a los ciudadanos. Claro que todavía se puede hacer mucho más.
Eso no es una regla ni en el tiempo pasado ni en el actual. Quién sabe quién hizo eso por Cagua. Lo felicito. La Onidex, que es un servicio complicado, está bajo la jefatura de una mujer jovencita. Sí que se puede. Vicente Amengual Sosa. c.i. 3.202.469

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