UN MONUMETO A LO ABSURDO.
El precio de la gasolina en Venezuela es vil, es irrisorio, es absurdo. Lo menos distante del precio de un litro de gasolina, se me ocurre que es un cafecito, que ya va por ocho bolívares en los sitios más baratos. En la práctica sucede - y así lo reconoció Nicolás - que casi todos los usuarios le dejamos al encargado de surtirla el resto de un billete de 2 o 5 bolívares, según sea el consumo. Hasta los motorizados, que consumen menos, lo hacen. Como demócrata que soy, Nicolás, te digo con franqueza que apoyo ciertas medidas muy puntuales que tomas, aunque tenga divergencias insalvables en lo demás. Piénsalo un poquito más, me refiero a lo del aumento de la gasolina. Que aumentes la gasolina porque no tienes cobres es como que un padre de familia le diga a sus hijos que no le puede hacer regalos en Navidad porque tiene muchas deudas. Y resulta que las deudas de ese padre son en parrandas, juegos, regalos a amigos y amigas, lujos, etc. Y es posible que pensemos otra cosa: De hecho, ...